EL OCASO DE LA EDAD TARDÍA III: PALEOCRISTIANISMO

Pues sí, a partir de esta época, en efecto, aparecen los más abundantes y significativos monumentos del arte paleocristiano peninsular. Las basílicas se multiplican, especialmente en las islas Baleares y en la región litoral de las provincias Tarraconense y Cartaginense. Las necrópolis han proporcionado valiosos datos demostrativos de la difusión del cristianismo en la Península y de su arraigo en los distintos sectores de la población. Así, los monumentales sarcófagos que nos han llegado (algunos de los cuales fueron esculpidos en talleres extranjeros) nos hablan de los ricos y poderosos cristianos que los adquirieron. Al mismo tiempo, la abundancia de objetos cerámicos adornados con motivos típicamente cristianos nos hablan también da la numerosa clientela de cristianos que los hicieron objeto de su demanda.
Pero además de estos tetimonios arqueológicos poseemos también otros de carácter literario, que nos permiten conocer aspectos de la organización y la actividad de la iglesia del siglo IV. Uno de los más interesantes es el relativo al Concilio de Iliberis (Elvira, Granada), celebrado entre los años 303 y 314. A él concurrieron los representantes de 19 diócesis hispánicas, en su mayor parte del sudeste peninsular. En sus actas, además de información relativa a las distintas iglesias, se encuentran muchos datos, de los que entresacamos algunos para hacernos idea de parte de los problemas que aquejaban en aquella época a las iglesias de Hispania. Veamos algunas disposiciones:

"CANON 17: Pareció bien disponer que no se concediese la comunión, ni en la hora de la muerte, a los que casaran a sus hijas con los sacerdotes de ídolos"
"CANON 19: Se ordena a los obispos, presbíteros y diáconos que no abandonen sus lugares de residencia con el pretexto de negociar, y que no vagabundeen por las demás provincias acudiendo a negociar en las ferias; ahora bien, si quieren negociar, que lo hagan en su propia provincia, o bien envíen a sus hijos, libertos, corredores o amigos para que negocien en su nombre".
"CANON 20: Si se descubre que un clérigo se dedica a la usura, pareció bien que se le prehibiese y además fuese degradado. Si se prueba que un laico es usurero, se acordó concederle el perdón con tal de que prometiese enmienda; pero si continúa cometiendo la misma iniquidad, será expulsado de la Iglesia".
"CANON 27: Los obispos y los demás clérigos sólo podrán tener consigo únicamente a una hermana o a una hija virgen consagrada a Dios; en ningún caso podrán tener a una extraña".
"CANON 33: Hubo copleto acuerdo en prohibir a los obispos, presbíteros y diáconos y a todos los demás clérigos puestos al frente de un ministerio que se abstengan de sus esposas y eviten el tener hijos: el que no lo cumpla, será privado de los honores clericales".
"CANON 36:No se harán pinturas en las iglesias para que no estén pintadas en las paredes de las mismas cosas que se veneran y adoran" (SE REFIERE AL EXTERIOR DE LOS TEMPLOS)
"CANON 48: Se acordó evitar que los bautizados tengan que echar monedas en la bandeja, como se solía hacer, PARA QUE NO PAREZCA QUE EL SACERDOTE VENDE LO QUE ÉL RECIBIÓ GRATUITAMENTE. También se prohibió a los clérigos o sacerdotes les laven los pies".
"CANON 60: Se acordó que no fuesen contados entre el número de los mártires los que fueron matados cuando se dedicaban a destruir ídolos, por cuanto que tal cosa no aparece escrita en el Evangelio ni hecha jamás por los apóstoles".
"CANON 62: Si se convierte un auriga o un pantomimo (ARTISTA DE TEATRO), se acordó que primero renuncien a sus artes y luego sean admitidos, de modo que no vuelvan más a su oficio".
"CANON 63: Si alguna, mientras su marido está ausente, concibe un hijo en adulterio y lo mata, se acordó no concederle la comunión ni siquiera en la muerte, para que no recaigan".
"CANON 79: Si algún fiel se juega el dinero al azar, es decir, a la tabla, será apartado; si demuestra haberse enmendado, podrá ser readmitido a la comunión después de un año".
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