16 ago 2012

CONVERSACIONES ENTRE NEGRÍN Y EL DUQUE DE ALBA. ACUERDO DE MUNICH.

En un intento de negociación, Negrín se entrevistó en Suiza con el duque de Alba con motivo de un congreso médico, al que asistió en calidad de congresista; mas de estas conversaciones no se derivó ningún resultado positivo, en parte debido a que Franco, quien, como hemos visto, estaba decidido a ganar la guerra, no quería suscribir ningún compromiso.
En estos momentos la situación europea se encontraba en los prolegómenos de la Segunda Guerra Mundial.  Las naciones que habían de ser beligerantes en el conflicto comenzaban a armarse y a asegurar sus reservas, y la ayuda que unas y otras habían venido prestando a las dos Españas fue suprimida.
Franco, que se había declarado neutral en el caso de que ocurriese una conflagración europea, fue criticado por Alemania, uno de sus principales aliados. Si se hubiese producido la crisis amistosa, hubiese redundado en beneficio de los republicanos.  Sin embargo, en el Acuerto de Munich el 29 de septiembre de 1938, en el que Inglaterra, Francia, Italia y Alemania se plegaron a las exigencias de Hitler con referencia a Checoslovaquia, se determinó que las potencias que habían ayudado al gobierno de Madrid siguiesen con su política de apaciguamiento. El triunfo diplomático de Alemania hizo posible la continuación de los envíos de ayuda.
Mientras tanto Negrín, en un gesto desesperado que le permitiese atraerse las simpatías de toda las fuerzas políticas de la nación, a fin de salvar a la República del desastre final, había intentado ganarse la voluntad de los católicos decretando el restablecimiento del culto, aunque ello no condujo a ningún resultado positivo.  El final de la República y de la guerra se acercaba.  Las potencias extranjeras comenzaron a retirar sus contingentes de tropas; se fueron los italianos, que embarcaron en Cádiz el 15 de octubre.  Las Brigadas Internacionales -o lo que quedaba de ellas- se marcharon el 15 de noviembre, tras desfilar entusiásticamente por las calles de Barcelona y recibir la despedida afectuosa y apasionada de Dolores Ibárruri, la Pasionaria.

No hay comentarios: